El maquillaje monocromático ha vuelto, y aquí te explicamos cómo puedes lucirlo.
Combinar los ojos, las mejillas y los labios puede parecer algo de otra época. Pero esta tendencia ha vuelto oficialmente y luce mejor que nunca.
El maquillaje monocromático consiste en elegir un solo tono y aplicarlo en todo el rostro. Es sencillo, rápido y te da un look impecable sin apenas esfuerzo.
La idea es elegir un color suave, como melocotón, rosa o bronce, y aplicarlo donde sea necesario. Aplica un poco del mismo colorete en las mejillas y los párpados, y luego dale unos toques en los labios. Las fórmulas cremosas son tus mejores aliadas, ya que se difuminan fácilmente y proporcionan un acabado natural y luminoso.
¿Lo mejor? No necesitas un kit completo ni mucho tiempo. Solo uno o dos productos, tus dedos y listo. Es una forma muy fácil de lucir fresca y elegante, especialmente cuando tienes prisa o viajas ligera de equipaje en los días de verano.